Que puedo decir que plasme todo lo que hemos vivido.
Que cosa puede ser peor que tener que soplarte horas y horas de escuchar peroratas donde no entiendes más que las palabras cerebro y cerebelo ( si es que están presentes)
Donde (ahora más que nunca) hueles a formol, el sillón de tu casa huele a formol, el piso de tu casa huele a formol y andas de arriba a abajo con un balde.
Qué puede ser peor que estudiar y mientras tanto pensar en que no sirve de nada que estudies porque igual van a preguntarte algo que no sabrás.
Qué hay peor que intentar reconocer algo en los cortes de bulbo raquídeo.
Qué peor que saber cuántos puntos te faltan para aprobar y compararlos con la planilla de ceros que plasma nuestros "puntitos".
Qué puede ser peor que decir: "mañana es mi punto de cerebro".
Y qué peor que escuchar clases sobre la médula cuando todo lo que quieres es dormir, o comer.
Qué cosa podría ser peor que escuchar a los que ya hicieron neuroanato decirte: así es, a las justas sacarás siete así te esfuerzes, así que no lo intentes.
Y las explicaciones parado encima de un banco, y de tres personas.
Y las estructuras que jamás escuchaste mencionar.
Y el terror.
Y la angustia.
Creo que nada. Nada.
Nada puede ser peor.
Que cosa puede ser peor que tener que soplarte horas y horas de escuchar peroratas donde no entiendes más que las palabras cerebro y cerebelo ( si es que están presentes)
Donde (ahora más que nunca) hueles a formol, el sillón de tu casa huele a formol, el piso de tu casa huele a formol y andas de arriba a abajo con un balde.
Qué puede ser peor que estudiar y mientras tanto pensar en que no sirve de nada que estudies porque igual van a preguntarte algo que no sabrás.
Qué hay peor que intentar reconocer algo en los cortes de bulbo raquídeo.
Qué peor que saber cuántos puntos te faltan para aprobar y compararlos con la planilla de ceros que plasma nuestros "puntitos".
Qué puede ser peor que decir: "mañana es mi punto de cerebro".
Y qué peor que escuchar clases sobre la médula cuando todo lo que quieres es dormir, o comer.
Qué cosa podría ser peor que escuchar a los que ya hicieron neuroanato decirte: así es, a las justas sacarás siete así te esfuerzes, así que no lo intentes.
Y las explicaciones parado encima de un banco, y de tres personas.
Y las estructuras que jamás escuchaste mencionar.
Y el terror.
Y la angustia.
Creo que nada. Nada.
Nada puede ser peor.